Si antes me medio quejaba de haber tenido que estar años de mi vida explicando a qué me dedico, no te imaginas la cantidad de veces que me han preguntado cuál es la diferencia entre un fisioterapeuta y un osteópata y entre un osteópata y un quiropráctico. De hecho, es rara la semana que no tengo que volver a explicarlo en consulta. Y la verdad, es un poco incómodo responder como se merece en menos de 5 minutos hablando.
Para entender la diferencia vamos primero a hablar un poco de la historia de cada una de ellas y luego haré un resumen de las diferencias prácticas que, sospecho, es lo que más interesará al lector.
Para los lectores que, en este punto del artículo, estén tan aburridos que hayan decidido no volver a saber nada de la osteopatía o que salgan corriendo al ver a uno de nosotros, les recomiendo que se salten la parte de la historia, que es lo que es y desgraciadamente por más que quiera sintetizarlo sigue siendo un poco gravoso de leer.
Fisioterapia
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define en 1958 a la Fisioterapia como: “El arte y la ciencia del tratamiento por medio del ejercicio terapéutico, calor, frío, luz, agua, masaje y electricidad”. Además, la Fisioterapia incluye la ejecución de pruebas eléctricas y manuales para determinar el valor de la afectación y fuerza muscular, pruebas para determinar las capacidades funcionales, la amplitud del movimiento articular y medidas de la capacidad vital, así como ayudas diagnósticas para el control de la evolución».
Por su parte, la Confederación Mundial de la Fisioterapia (W.C.P.T.) realiza la siguiente definición, que fue suscrita por la Asociación Española de Fisioterapeutas (A.E.F.) en 1987: “La Fisioterapia es el conjunto de métodos, actuaciones y técnicas que, mediante la aplicación de medios físicos, curan, previenen, recuperan y adaptan a personas afectadas de disfunciones somáticas o a las que se desea mantener en un nivel adecuado de salud”.
En España, el 2 de marzo de 1969 se celebra una reunión en Madrid para la fundación de la asociación española de fisioterapeutas y no es hasta el año 1989 cuando se establece el título oficial universitario de fisioterapia y sus directrices generales.
Osteopatía
La Osteopatía se define como la ciencia y el arte de diagnosticar y de tratar las disfunciones de movilidad de los tejidos del cuerpo humano, que provocan trastornos y perturban el estado de salud del organismo.
Está basada en 6 principios:
- El cuerpo es una unidad.
- La estructura y la función están relacionadas.
- El cuerpo posee mecanismos de autorregulación.
- El cuerpo tiene la capacidad inherente de defenderse y de repararse.
- Si la capacidad de adaptación y autorregulación se pierde, puede aparecer la enfermedad.
- Un tratamiento racional debe basarse en los principios anteriores.
Como añadido a estos principios básicos de la filosofía osteopática, tenemos otros conceptos que facilitan al osteópata su enfoque del paciente:
- El movimiento de los fluidos es esencial para el mantenimiento de la salud.
- El sistema nervioso juega un rol vital en el control del cuerpo.
- Hay componentes somáticos de la enfermedad que no son únicamente manifestaciones de la misma.
A partir de estos principios, el tratamiento osteopático pone especial atención en la estructura del individuo y en los problemas mecánicos de su cuerpo.
Más historia de la osteopatía
La Osteopatía nace en EEUU en 1874 y en 1892 se crea la primera escuela de osteopatía del mundo.
En 1917, Se establece en Londres la primera escuela de Osteopatía en Europa, la British School of Osteopathy.
En 1936 se funda el BCNO, British College of Naturopathy and Osteopathy, actual BCOM British College of Osteopathic Medicine
En 1992 se crean los Estatutos del Registro Europeo de los Osteópatas, hoy día, Federación Europea de Osteópatas (EFO).
No es hasta el año 1993 cuando se reconoce a la Osteopatía en Reino Unido como profesión independiente y específica, pero no será hasta el año 2000 cuando haya una plena legalización de la práctica osteopática.
Quiroprácticos
La quiropráctica o quiropraxia es un tipo de medicina alternativa que se centra en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos mecánicos del sistema musculoesquelético, especialmente la columna vertebral, bajo la creencia de que estos trastornos afectan la salud general a través del sistema nervioso y que su corrección mejora o restaura la salud.
La Quiropráctica defiende que el correcto funcionamiento del sistema nervioso permite al cuerpo hacer uso de su capacidad de recuperación y regeneración, tendiendo siempre a un estado óptimo de salud.
Y el buen funcionamiento del sistema nervioso requiere una columna vertebral sana.
La quiropráctica nace en EEUU, fue David Palmer quien la funda en 1895, y en 1897 se abre la primera institución educativa en quiropráctica.
En 1988 se funda la federación mundial de quiropráctica.
La quiropráctica llega a España a través del Real centro Universitario Mª Cristina otorgando un título superior en quiropráctica. Reconocido y acreditado por el European Council
on Chiropractic Education (ECCE).
¿Cuál es la regulación de la osteopatía en España?
Tenemos que aclarar que, en España, la Ley de Ordenación de Profesiones Sanitarias (LOPSE, para abreviar), sólo reconoce como profesión sanitaria a la fisioterapia y establece la obligación de obtener el Título de Grado en Fisioterapia, cuya duración en la actualidad es de 4 años, para poder ejercer legalmente.
Sin embargo, esta legislación también prevé la aplicación de todos aquellos medios físicos que puedan tener efectos terapéuticos.
Es precisamente esta situación la que hace difícil la convivencia de fisioterapeutas, osteópatas y quiroprácticos en España.
Mientras no exista una regulación y estudios oficiales en España de las demás disciplinas, se dará pie a grandes diferencias formativas y educativas entre un profesional y otro.
Me explico… un fisioterapeuta, al igual que un médico o enfermero, podrá ser mejor o peor en el desempeño de su profesión, pero tenemos la garantía que ha cursado y aprobado con éxito su carrera universitaria con su plan de estudios y prácticas exigidas.
Para que nos entendamos, ahora mismo en España cualquiera puede abrir un centro y ejercer la osteopatía y la quiropráctica sin que tenga ningún control sobre él el estado, pues como hemos dicho aquí sencillamente «no existe». ¿Es ilegal? No, es alegal.
Al no haber regulación comienzan las batallas legales entre los diferentes profesionales. Los diferentes colegios de fisioterapeutas en España reclaman que sólo se pueda ejercer la osteopatía a través de la fisioterapia haciendo campañas de acoso y derribo a osteópatas, quiroprácticos, masajistas especializados y otros profesionales del sector.
Los primeros interesados en la regulación somos los profesionales formados, entendiendo el intrusismo no como que un quiropráctico u osteópata haga las funciones de un fisioterapeuta que ha quedado claro que no las hacemos, sino que una persona sin formación ni escrúpulos se haga pasar por lo que no es.
Como hemos explicado en este artículo las competencias de unos y otros son diferentes, no tanto en las patologías a tratar pero sí en el abordaje de las mismas.
Ningún osteópata o quiropráctico por sí mismo es considerado profesional sanitario en España mientras no cambie la legislación.
Por el bien del paciente lo que hay que hacer es regular las diferentes alternativas terapéuticas y garantizar que todos los profesionales tengan la formación mínima exigida por sus diferentes colegios y estatutos europeos.
¡El día que exista dicha regulación ganaremos todos!
Para que nos entendamos mejor, haré una definición en la práctica:
Definición de Fisioterapeuta, quiropráctico, osteópata.
Fisioterapeuta
Profesional sanitario. Diferentes especializaciones. Trata patologías del sistema musculoesquelético. Patologías deportivas, recuperación de lesiones por traumatismo, fractura o postquirúrgicas.
Se suele centrar en el punto de lesión, es decir, que si tienes una patología en el hombro el fisioterapeuta tenderá a tratar el hombro, abordando a lo sumo estructuras cercanas.
Puede realizar tratamiento manual, ejercicios, o con diversa aparatología (TENS, onda corta, laser, magnetoterapia, diatermia, ondas de choque…).
Como todos los profesionales, el tratamiento que realice dependerá de la formación del especialista, pero hay 2 grandes diferencias: Si es un tratamiento realizado por aseguradora o por privado.
- Fisioterapeuta que trabaja en aseguradora o Seguridad Social. Los servicios de rehabilitación por los diferentes seguros suelen estar saturados, teniendo pocos profesionales con un número muy elevado de pacientes a atender por hora lo que hace casi imposible que el fisioterapeuta pueda realizar el tratamiento que le gustaría, viéndose en muchos casos obligado a trabajar como en una «fábrica de montaje». Aquí recalco que el problema no está en el profesional; está en el sistema. En este caso también nos encontramos con la poca libertad de elección de la terapia a realizar pues está marcada por el médico rehabilitador. La frecuencia del tratamiento también será variable según la patología a tratar, pero para rehabilitaciones es muy frecuente la necesidad de sesiones diarias. 15, 20, 30 sesiones con periodicidad diaria hasta alcanzar los objetivos.
- Fisioterapeuta que trabaja en privado. Tratamiento de calidad. Elección de terapia por el fisioterapeuta (lo que él considere; terapia manual, aparatología, punción seca…). Dependerá del centro, pero el fisio suele establecer el tiempo adecuado a cada paciente. La media suele estar de 30 min a 60 min por consulta. La frecuencia del tratamiento también será variable según la patología a tratar, pero en consulta privada es más frecuente realizar sesiones semanales.
Quiropráctica o quiropraxia
En España no se le considera profesional sanitario. Tratan las diferentes patologías corrigiendo los bloqueos articulares prestando especial atención a los bloqueos de la columna vertebral.
Priorizan la lesión articular sobre las lesiones del resto de tejidos (músculos, fascias, tendones…).
El tratamiento dependerá de cada profesional, su escuela y formación, pero en líneas generales son tratamientos cortos de 5 a 10 minutos de duración.
Hay quiroprácticos que atienden a los pacientes individualmente y los hay que los atienden en grupo, es decir una sala con varias camillas. Realizan «ajustes vertebrales» o bien manuales o con aparatos que se llaman «martillo percutor», o ambos.
Pueden usar diversa aparatología de medición de la temperatura corporal, ver las líneas de gravedad y demás para analizar la mecánica corporal y evaluar las disfunciones vertebrales.
Normalmente no hacen desvestir al paciente, le tratan sobre la ropa. La frecuencia del tratamiento puede variar pero es muy normal que se acudan 2 o 3 sesiones semanales durante un par de semanas, 2 sesiones semanales otro periodo de tiempo similar y luego 1 sesión semanal durante un periodo más prolongado.
En la fase de mantenimiento sería suficiente con 1 sesión al mes.
IMPORTANTE: No quiero que toméis esto al pie de la letra porque obviamente siempre dependerá del estado de salud del paciente y del criterio del especialista.
Osteópata
En España no se le considera profesional sanitario. En la primera consulta intentará determinar cuál o cuáles son los problemas principales de la persona. Hará preguntas de todo tipo, actuales y del pasado remontándose a veces hasta el periodo fetal o al parto.
Preguntará por el estado anímico y emocional del paciente, por su sistema digestivo y, en general, por todo aquello que considere necesario para hacerse una idea del estado actual del paciente y qué le ha llevado a ese estado.
Tras las preguntas realizará una exploración visual de la persona, viendo sus ejes y líneas de gravedad. Analizará los movimientos de su columna y le realizará diferentes pruebas ortopédicas (con las manos) para determinar los problemas mecánicos.
Finalmente pasará a la palpación.
Buscará con sus manos las diferentes alteraciones de los tejidos, ya sean del sistema musculo- esquelético, vísceras, o del cráneo.
Generalmente empiezan a tratar ya en la primera sesión tras la evaluación, salvo en casos muy complejos que requieran mucho tiempo de exploración o de concienciación y explicación al paciente de su estado actual.
El tratamiento dependerá como es obvio de lo que le ocurra al paciente, pero podrá diferir mucho el tipo de tratamiento del osteópata según la línea de formación de que disponga.
Lo normal es encontrarse un osteópata que integre las diferentes técnicas y modalidades osteopáticas (estructural, visceral y craneal) y realice un tratamiento integral de la persona. Pero existen osteópatas más afines a las técnicas miofasciales y craneales que son muy suaves y funcionales.
Los hay que sólo trabajan a nivel estructural o que se decantan por un tipo u otro de técnica y los hay que no realizan las famosas manipulaciones vertebrales por diferentes motivos. Podría decir que de cada 10 osteópatas que visites te encontrarás 10 osteópatas muy diferentes entre ellos. Aunque el fin será el mismo, restablecer el movimiento y equilibrio de los tejidos.
A diferencia del quiropráctico, el osteópata no prioriza siempre la lesión articular sobre el resto de los tejidos. La filosofía de ambas especialidades quiropráctica y osteopática es afín y casi diría que el punto de inflexión se encuentra aquí.
Los osteópatas también normalizan la columna vertebral con manipulaciones más o menos parecidas a los quiroprácticos, pero prestan mucha atención a los tejidos, músculos, fascias, ligamentos, etc.
De hecho, como he dicho no siempre consideran necesario manipular las articulaciones.
De ahí también la diferencia del tiempo por sesión. Una consulta media de un osteópata ronda una hora la primera sesión y el resto de sesiones, dependiendo de la patología y demás, de 30 a 60 min, contando con el tiempo de quitarse y ponerse la ropa (pues habitualmente desvisten a los pacientes), hablar con el paciente dándole consejos e indicaciones terapéuticas, etc.
La frecuencia de las sesiones varía según cada profesional, pero lo normal en una patología crónica de meses o años de evolución, es una sesión semanal hasta salir de la fase aguda o hasta que el paciente perciba una mejoría del 40-50%.
A partir de aquí se pasará a ver al paciente a los 15 días, y si todo va bien se le dará el alta y se le recomendará acudir 1 vez al mes o cada 2 o 3 meses a revisión.
En una patología aguda de días de evolución normalmente basta con una sola sesión, a lo sumo dos para la resolución del problema.
Sé que son conceptos parecidos y difíciles de diferenciar, pero seguro que ahora comprendes mejor por qué la fisioterapia, la quiropráctica y la osteopatía no son lo mismo.